martes, 25 de marzo de 2008

Oliver Messiaen: música para pájaros

Estos dos enlaces está indirectamente relacionados con la polisemia, con los códigos; pero a través de la música. A Messiaens hay que escucharlo. Si quieren saber algo más de él, lean los dos últimos enlaces. Es una maravilla. Desde el punto de vista rítmico se inspiró en la música griega e india, entre otras, y a partir de 1940 su fuente más constante de inspiración melódica fue el canto de los pájaros (recorrió el mundo observando y transcribiendo el canto de cientos de pájaros), que introdujo en su obra en contextos tan diferentes como los siete volúmenes de Catalogue d'Oiseaux (1956-1958) para piano o el Jardin du sommeil d'amour de la sinfonía Turangalîla y los Coros del amanecer para 18 instrumentos de cuerda de la sección Epôde de la obra Chronocromie (1960). Estos recursos técnicos permitieron a Messiaen adoptar una dirección independiente en un momento en el que la mayor parte de los compositores europeos se dividían entre el neoclasicismo y el dodecafonismo. Otro factor que acentuó su independencia fue su motivación espiritual, católica, y la temática de su obra. Estas características se combinan en su ópera estrenada en París, Saint François d'Assise (1975-1983), en donde une el canto de los pájaros y la vida austera del santo con diversas técnicas musicales en una de las obras más importantes del siglo XX.

No hay comentarios: